Reuben Al Fine: Gracias Santxikorrota.
Inicio esta serie de colaboraciones en la etiqueta RUiNA, con la intención de que otros miembros del Club prosigan el camino emprendido. Como ya sabéis de sobra, RUiNA es la revista de incierta periodicidad del Club. Hace ya un tiempo que no aparece por vuestras manos, signo inequívoco de que las aportaciones enviadas hasta la fecha no han reunido la calidad suficiente para ser publicadas. Espero que próximamente, y a través del medio que nos brinda la red de redes, este hecho se subsane. Ahora no hay excusas posibles. Cuando tengáis preparado vuestro artículo, poneros en contacto con Santxikorrota y éste lo insertará en el blog amablemente. Recopilado una cantidad suficiente de contribuciones, se estará en disposición de editar un nuevo número en versión papel, dirigida especialmente a los amigos que no se encuentran tan avanzados como nosotros en la era informática. Es una cuestión por tanto, y entre otras cosas, de solidaridad.
Ya sabéis que podéis escribir prácticamente sobre cualquier cosa, siempre y cuando tenga un mínimo atisbo de ajedrez y/o/u relación con el Runa. La idea ya ha sido explicada anteriormente, si bien se pretende que haya algún contenido inédito para sorpresa de todos.
Comienzo con una posición que se dio recientemente en la práctica magistral…del Club. Por el momento omitiré el nombre de los contendientes para evitar sospechas. Y dada la generalizada afición y relativa habilidad de los miembros para el análisis en masa, propongo el examen de la misma. Ya sé que la excitante “metida de manos” sin control alguno resta algo de emoción al ejercicio, pero este medio no lo permite de momento, si bien aprovecharemos la interacción que nos brinda.
Como podréis observar, el negro ha conseguido ganar un pichón y desea concretar su posición de ataque. Juegan blancas, y para los menos avezados diré que su dama está colgando.
En estos casos es práctica tradicional que parte de los observadores se tornen cómplices de la causa blanca y, lógicamente, el resto lo haga por el bando contrario. Llegados a este punto lanzo definitivamente el reto:
¿Podrá el blanco sostener la posición con algún chance?
¿Será el negro quie se abalance sobre su presa con fiereza?
P.D.: No pongáis la posición en motores tipo Fritz. Eso lo podía haber hecho yo sin complicarme tanto la vida.
Como dato añadido para los más impacientes, os aclaro que la tajada se la llevó el amigo de Baltasar, si bien la colaboración albina fue extrema.
4 comentarios:
Voy a meter mano por primera vez, evidentemente llama la atención que la dama está amenazada por el caballo y que esto sólo deja a las negras dos alternativas:
1. Moverla.
2. Eliminar la pieza que amenaza.
Estudiaré parcialmente el primer caso. ¿Donde puede moverse la dama? no a la tercera fila ni a e2 pués sería tapiñada en una, en f2, a continuación de Ch3+ y doblete.
entonces sólo queda analizar Dh2 y Dd2, así como el segundo supuesto.
Una vez hecho lo fácil, que meta mano otro, u os amenazo con seguir poniendo día a día los análisis correspondientes al resto de variantes.
El análisis previo de zarkovsi resulta muy constructivo pero del todo incompleto. La nena puede migrar también a h1, si bien con un futuro realmente comprometido para las blancas.
Así 1...Dh1 2.Ce2+,Rg2 [si 2...Rf2 3.Df4+,Rg2 (3...Re1 4.Cc3+,Rd2 5.Te2#) 4.Tg3+,Cxg3 5.Dxg3#] 3.Txe4,Tf7+ 4.Rxf7,Dxh7+ 5.Rf6,dxe4 6.Dxe4+ y el negro debe hacer valer su ventaja.
Bueno, bueno, me olvidé de Dh1, pero no hace falta tanto análisis, con Th3 adios a la nena.
Nuevamente tengo que mostrar mi desacuerdo contigo, amigo zarkovsi. Salvo que juguemos a cosas diferentes, debo asumir mi contiuación como la más exacta, dado que busco con ella la matanza del monarca enemigo.
Si tu objetivo en el juego es engullir hasta el hartazago, enhorabuena, has encontrado la mejor.
Publicar un comentario