jueves, 30 de septiembre de 2010

Confesiones de un Tramposo en el SAI (2)

CONFESIONES DE UN TRAMPOSO EN EL SAI Parte II. Robar a un ladrón (por Nemoroso)

Bueno tal y como os dije, aquí tenéis más testimonios de este trilero del Elo que tan generoso está siendo con nosotros. Ahora nos aporta nuevas perspectivas para entender sus actividades.

Creo que si alguien me pregunta a la cara porque me metí en esto de hacer trampas en los SAI de ajedrez, difícilmente me creería cuando le dijera que lo mío fue otra historia más de un ángel caído. Y es cierto, yo era un tipo honesto como ustedes, que no le gustaba el juego sucio y que día a día se esforzaba en alcanzar la excelencia ajedrecística. Contaba por entonces con un elo bajo-medio entorno a los 1750-1800 puntos ( hay que tener en cuenta que hoy en día dispongo medios suficientes para crear jugadores invitados “guest” en casi cualquier SAI y hacerlos pasar de ese rating de más de 2300 elo en menos de 2 horas, más tarde explicaré con que motivo hacemos esto). Y ignoraba tal como ustedes hacen ahora que es lo que realmente se cocía en los SAI. Pronto me di cuenta que mi juego a pesar de estar evolucionando y alcanzado mejores resultados e incremento de elo en competiciones oficiales (en vivo y en directo), por el contrario en los SAI continuaba instalado en la misma frontera, y siempre que desarrollaba una tendencia natural a incrementar mi elo surgía una inexplicable racha de partidas perdidas contra rivales en apariencia iguales o incluso inferiores a mí que desplegaban un juego casi perfecto. Y esto jugadores no venían solos, era una ristra de 5 o 6 partidas seguidas en la que como resultado no podía evitar perder preciosos puntos elo y retroceder enormemente en mis aspiraciones. Pronto me cansé de hacer el cangrejo contra un muro virtual y empecé a sospechar que algo olía a podrido en Dinamarca. En fin os ahorrare detalles, pero en definitiva pude contactar con algunos “daneses nativos” que me desvelaron secretos profundos de los SAI.

Supongo que a estas alturas ya os imagináis de que se trata. Exacto, el afán comercial de los SAI les lleva a incrementar la adicción de sus miembros, y uno de los procedimientos más eficaces es regular e intervenir en su natural evolución como jugadores. ¿Cómo hacen esto? Mediante estadísticas de juego obtienen perfiles de cada jugador, de ellos deducen un tipo u otro de tratamiento, que puede variar desde dejar libre (aunque bajo observación) tu evolución natural, o intervenirla tanto a favor (las menos veces, básicamente jugadores titulados) como en contra, siendo este el más común de los casos. Ya os digo, en base a sus precisas estadísticas determinan tu elo medio real y establecen donde fijar el punto de inflexión, del que difícilmente te dejarán pasar, con lo cual siempre mantienen la tensión álgida, y en constante interés por superar nuestras marcas, y todo esto lo llevan a cabo de forma automática y sin pestañear. ¿Cómo evitan que pases del punto de inflexión? Sencillísimo, usan lo que lo que en el argot de los tramposos conocemos como Hound dogs (perros de presa). Un Hound dog es un motor de juego que oculta deliberadamente su nivel elo, es más lo adapta al de su victima para hacerse parecer interesante y asequible a esta, cuando en realidad son monstruos de silicio implacables; pero lo peor de todo es que nunca actúan solos, siempre atacan en manada. Cuando un jugador intervenido se acerca a su limite elo, se activa el sistema de Hound dogs, y casi todas las búsquedas de partidas que haga, terminan por enfrentarlo a uno de ellos, y luego otro, y otro, con el resultado que todos imaginan. En realidad no hay forma de escapar, por que el servidor bloqueará casi todos nuestros intentos de retar jugadores en particular, condenándonos a hacer retos generales, que serán exclusivamente atendidos por los Hound dogs. Como resultado de su enfrentamiento con una manada de Hound dogs un jugador suele retroceder de 50 a 150 puntos, lo cual hiere profundamente su orgullo en el peor momento posible. Puede que esa noche se retire airado, y no juegue más en el SAI, pero al día siguiente lo volverá a intentar, y ahora que los perros no le prestan atención (pues está lejos de la valla) verá como su nivel de juego es el que acostumbraba ser, y tras ganar algunas partidas se irá animando hasta que de nuevo se aproxime a la valla, y los perros se pondrán a ladrar otra vez, y vuelta a empezar. ¿Acaso nunca os ha pasado esto? Pues ocurre constantemente, los Hound dogs trituran entre sus fauces cientos de puntos elo a diario.

Próximamente os explicaré como decidí robar al ladrón y los problemas que sufrí hasta poder descubrir otra de las grandes estafas de los SAI (esta no me la contaron los daneses la averigüé por otros medios): todas las charlas publicas o privadas, en incluso mensajes entre usuarios son grabados y revisados de forma automática.

7 comentarios:

iñaki dijo...

Muy interesante, aunque hay que poner un poco de fe, pues no aporta muchas pruebas.

Santxikorrota dijo...

Todo se andará, no desesperes.

Javier Fernández Hierro dijo...

Yo dispongo de medios para hacer llegar a un macaco a 2300 en una semana. Os ahorraré más detalles, pero conozco a unos marcianos nativos que me explicaron los secretos de cómo lograrlo, aunque no os lo cuento para darle más vidilla...

Amoavé, no podemos pasar por alto varias cosas:

- La carga de la prueba recae en quien hace las afirmaciones.
- Afirmaciones extraordinarias requieren pruebas extraordinarias.
- Los hechos que se afirman implican un esfuerzo organizativo y de recursos tan brutal que, más extraordinarios, los convierte en extravagantes.
- Pretender que alguien revisa los textos de un chat (¿cuantos cientos de personas se supone que se dedican a ello?) entra de lleno en el terreno de la paranoia.

zarkovsi dijo...

Como dice Santxi, aún queda una entrega.

Por otra parte, ¿a quién le importan las pruebas?. Creo que Dan Brown está detrás del tema para su nuevo best seller.

Te recuerdo, Javier, que el Club anda necesitado de dos o tres macacos para el cercano Campeonato Navarro por Equipos, a los marcianos me parece que no se les puede hacer licencia, de momento.

(El Sr. Anónimo puede hacer a continuación el comentario jocoso de turno. ¡Venga!, que te lo he puesto a huevo.)

Javier Fernández Hierro dijo...

Dando por supuesto que a mí tampoco se me pedirán pruebas y que todos aceptarán de buen grado que tienen 2300, por un módico precio por mi actuación como representante ficho a cinco.

iñaki dijo...

Igual no es sitio de proponerlo, pero si el miércoles es mal día para los que dan clase, igual se puede cambiar a otro día de la semana.

Javier Fernández Hierro dijo...

Mal día ¿para?
Si te refieres a los miércoles Runa, está claro que es el peor día. Yo a veces paso a partir de las 9.45 porque me pilla de camino a casa, pero los que viven lejos...
Otra cosa es si siendo otro día la asistencia sería mayor o no. Eso dependerá de cada uno.

A mí personalmente me preocupa mucho más la actividad ordinaria de un club de ajedrez que su vertiente estrictamente lúdica.
La segunda sólo es entendible con la primera: si las actividades secundarias se convierten en principales se pierde el nexo de unión.

¿Dónde jugar cafetero?

Aquí iremos actualizando el listado de bares con tablero. Para enriquecer el mismo puedes hacer un comentario en dicha entrada. Gracias de antemano por tu colaboración.

- Bar Terminal. Calderería, 19. Pamplona (los jueves hay concierto)
- Bar Garazi. Calderería, 36. Pamplona (no hay mucha luz)
- Nuevo Casino Principal. Pza. Castillo, 44. Pamplona (muy tranquilo)
- Bar Atalaya. Ctra. Tajonar, 23. Pamplona (cerca de José Vila)
- Billares Liverpool. Iturralde y Suit, 7. Pamplona (entre carambolas)