Ecuador en Sofía (y 3)

Anand repitió con piezas negras la Defensa Eslava que tan buen resultado le diera en la tercera partida consiguiendo tablas en 44 movimientos con incidente incluido. Un corte de fluído eléctrico en el centro de la ciudad de Sofía al inicio de la partida interrumpió el duelo casi un cuarto de hora.

El match está previsto a doce partidas que concluirá cuando uno de los dos llegue a 6.5 puntos, jugandose si hubiera empate un desempate con (4) rápidas, y si persiste, otro con partidas relámpago (2) y muerte súbita.

El sexto envite, no se pareció a ningún otro de la historia de los campeonatos del mundo. Comenzó como una Catalana normal, en la que Topalov se desvió de la variante que le condujo al desastre en la cuarta partida. Luego Anand introdujo una novedad que llevó a un mediojuego en el que su pareja de caballos se enfrentó a la de alfiles de Topalov, para lo que espoleó a sus equinos en una secuencia única de trece jugadas consecutivas con el caballo. El aspirante logró crear amenazas suficientes para desbaratar los planes del campeón y al final hubo un nuevo reparto del punto.

¿Alguien recuerda un viejo proverbio de nuestra época juvenil, donde "la sinfonía de fabianes" era sinónimo del buen hacer ecuestre sobre el tablero? Recuerdo por aquel entonces merodeaba en la fauna foral un tipo de nombre Fabián, apellido primo Bilbao y postrero Eguren. El mozo era singular a nuestros tiernos ojos: jugaba al ajedrez, escribía en el Diario, se presentaba a alcalde,... Creo que en uno de esos análisis que se organizaban tras acabar las partidas, el muchacho dijo algo sobre los potros. Algo como que era la mejor pieza del ajedrez, y claro, de tanto repetir su aforismo nosotros sacamos el otro. Viejos y celebérrimos recuedos, como aquel que decía el Maestro Barrios: "Antes comer y luego pensar".